Trucos para proteger del calor a los animales

proteger del calor a los animales

Con el aumento constante de las temperaturas en verano, es importante proteger del calor a los animales.

Todos los años nos encontramos con olas de calor que arrasan a todo el que salga a la calle o esté en su casa. No obstante, muchas veces no nos damos cuenta de que no solo nosotros pasamos calor. Es decir, si tenemos mascotas, es importante que las tengamos en cuenta para estos casos. Por tanto, debes proteger del calor a los animales. Más aún en toda la provincia de Toledo e incluso en el caso particular de Torrijos. Ya que vamos a tener unas temperaturas exageradas todo el verano.

Por todo ello, es importante proteger del calor a los animales y tenerlos en cuenta a la hora de buscar el alivio frente a estas temperaturas. Esta despreocupación que suele haber muchas veces no suele venir del abandono. Ya que la mayoría de personas que tienen una mascota es porque la quieren. Por tanto, esto suele deberse al desconocimiento.

Así pues, para paliar esto, debes tener en cuenta que, al contrario que los humanos, los perros no suelen sudar, por ejemplo. Por tanto, esto dificultar que regulen su temperatura corporal y puedan bajarla. Por lo que el calor que sienten es mayor que el que sentimos nosotros. De esta forma, el perro sería una de las mascotas que peor termorregula su temperatura. Puesto que le cuesta mucho evacuar el calor. Por tanto, debido a las altas temperaturas, puede sufrir golpes de calor. Todo esto le puede provocar daños irreparables e incluso resultar mortal.

Por todo ello, es imprescindible vigilar a nuestras mascotas en verano, sobre todo cuando se producen estos picos de temperatura. Para ello, a continuación, te vamos a mostrar algunos consejos que debes tener en cuenta para proteger del calor a los animales.

1. Evita paseos y grandes esfuerzos en las horas más calurosas

Seguramente esto será obvio para muchos, pero es importante señalarlo. Es decir, correr al sol a las 2 de la tarde está prohibidísimo. Así pues, como veterinario, se desaconsejan los paseos y esfuerzos físicos a las horas de mayor incidencia. No obstante, sí que deberá salir a las horas más frescas. Es decir, por la mañana o por la noche, para que así, pueda hacerlo de manera segura.

Además, deberíamos tener en cuenta que los animales siempre deben pasear a la sombra y evitar el asfalto. Esto último es crucial porque el alquitrán puede llegar a calentarse hasta los 80ºC al sol. Por lo que tu mascota puede tener quemaduras muy graves en las patas. E, incluso, puede dañar permanentemente sus almohadillas.  

2. Jamás dejes a tu mascota dentro del coche sola cuando aparcas

La cifra de animales que mueren debido al calor que sufren por estar encerrados dentro de un coche se eleva preocupantemente cada año. Esto es una irresponsabilidad que causa muertes. Así pues, un perro encerrado en un coche aparcado al sol muere rápidamente de insolación. Además, puede sufrir secuelas por haber permanecido en el coche solo 12 minutos. Igualmente, en estas condiciones extremas de calor, en una hora estaría muerto.  

Reconocer los síntomas de una insolación es importante. Por tanto, si tu perro tiene los ojos rojos, un jadeo rápido, vómitos, somnolencia o temblores, seguramente tenga una insolación. Si esto ocurre, lo mejor es envolverlo en una toalla húmeda para bajar su temperatura corporal. Posteriormente deber llevarla a una clínica de urgencias veterinarias rápidamente.

3. Debe beber tanta agua como necesite

Lo mejor es que tu mascota pueda descansar en un lugar ventilado y fresco dentro de tu casa. Para ello, puedes colocar una toalla húmeda en el tendedero, de esta forma tu mascota reconocerá esto como un lugar fresco y acudirá a refrescarse.

Otra forma sería mojándolo para refrescarlo. No obstante, hay animales a los que no les gusta el agua. Por lo que lo mejor es mojarte la mano y acariciarle con ella. En el caso de que le guste el agua, puedes comprarle una minipiscina para animales o mojarle con una manguera. Eso sí, que sea como una lluvia desde arriba y con poca presión.

Además de mantenerlo fresco por fuera, también debes hacerlo por dentro. Por lo que tu mascota debe tener siempre un cuenco con agua fresca. Lo mejor es que lo vayas cambiando, aunque no lo haya terminado, para que el agua siempre esté a una temperatura agradable. Otra idea es darle alimentos húmedos o humedecer el pienso. No obstante, si no le gusta esto, no insistas.