¿Arnés o collar para pasear a tu perro?
En cada paseo, es esencial conectar al máximo con tu mascota para que ambos disfrutéis. Igualmente, seguro que te estarás preguntando si es mejor comprarle un collar o un arnés. Como ambas opciones son totalmente válidas, vamos a detallar cuáles son las ventajas y desventajas de cada uno.
¿Arnés o collar para pasear a tu perro?
Inicialmente, tendrás que valorar cómo es tu perro y cuáles son vuestras necesidades para escoger uno u otro.
Arnés
Entre las ventajas, destaca que es una herramienta ideal para entrenar a los cachorros y enseñarles a pasear con calma y total concentración. En cierto modo, te proporciona mayor control, ya que con él puedes distribuir la presión ejercida sobre todo el cuerpo del animal, sin focalizarla únicamente en el cuello. Asimismo, evita posibles enredos y problemas de asfixia.
Otra de las ventajas es que, al viajar en un coche, esta herramienta es mucho más segura y cómoda para el perro.
Entre las desventajas, destacamos que a tu mascota le puede disgustar la sensación de llevarlo puesto. Por tanto, puede mostrarse poco receptivo a ponérselo o mostrar conductas inadecuadas antes de colocárselo. Conviene que esté confeccionado con un tejido suave y se adapte perfectamente a su anatomía, de lo contrario puede producir heridas por fricción.
Si te estás preguntando en qué tipo de perros utilizar el arnés, recomendamos que sea en los más hiperactivos, con los que hay más posibilidades de que tengas que tirar de la correa para evitar que se escapen, evitandoles una posible lesión en el cuello. También, puede estar indicado en cachorros que están en periodo de aprendizaje o en perros de pequeño tamaño o con cuello muy corto.
Por otro lado, los perros que tengan tendencia al colapso traqueal, o problemas respiratorios, deben utilizar arneses para evitar ejercer más presión sobre la tráquea. Asimismo, son ideales para razas con hocicos cortos, como los bulldogs o los carlinos.
Collares
Entre sus ventajas, debemos recalcar que los collares proporcionan mayor libertad de movimiento al animal. Además, son más fáciles de colocar y de ajustar que el arnés. Los hay de diferentes tamaños para que se adapten a perros de cualquier tamaño. Incluso, puedes dejarle puesto el collar durante todo el día, ya que es una opción muy cómoda para tu mascota.
Entre las desventajas, puntualizamos que algunos tipos pueden causar dolor o malestar dependiendo de su uso (o mal uso). Si tu perro suele tirar en exceso, puede existir un alto riesgo de que sufra contracturas, contusiones e incluso problemas de la glándula tiroidea. Imprescindible una buena educación en lo que se refiere a ordenes concretas de obediencia a la hora de pasear juntos.
El collar estaría indicado en perros que se portan bien durante el paseo o en aquellos que ya han sido entrenados para caminar tranquilamente a tu lado. También, es ideal para razas de pelo largo, porque, al contrario del arnés, evita que los pelos se enreden con facilidad.
En resumen, podemos alternar entre ambas opciones para entrenar eficazmente a nuestra mascota, dependiendo de cómo sea su personalidad o en qué etapa de su vida se encuentre. El arnés es la forma más segura de mantener al perro firme mientras está caminando junto a nosotros, reduciendo el riesgo de lesiones en su cuello, mientras que el collar puede ser una opción que proporcione más libertad y confianza al animal una vez esté socializado.
